En un momento donde los gastos médicos pueden impactar gravemente la estabilidad financiera de cualquier familia, contar con un seguro de salud es fundamental. Sin embargo, muchas personas se preguntan: ¿es suficiente solo con un seguro básico? La respuesta es sencilla: no siempre.

El seguro principal cubre los gastos médicos y hospitalarios, pero… ¿qué sucede con los costos adicionales como deducibles,  incluso las obligaciones del hogar cuando la enfermedad o accidente nos impide trabajar? Aquí es donde entra en juego el seguro complementario.

Este tipo de póliza está diseñada para protegerte más allá de la cobertura tradicional, ayudándote a cubrir esos gastos imprevistos que no siempre cubre tu seguro primario. A través del pago de una prima accesible, puedes recibir reembolsos, para ciertos gastos diarios mientras te recuperas.